American Gods sigue a su
particular ritmo y alcanza el ecuador de la serie con un capítulo que nos
centra en un personaje que teníamos por secundario (hasta el momento): la mujer
de Shadowmoon.
Los primeros veinte minutos
del capítulo nos muestran cómo era la vida de ella (con intentos de suicidio)
hasta la llegada de Shadowmoon, un ladrón con el que acabó casándose. Son unos
minutos en los que se siente cierta química entre los dos personajes, pero el
de ella no deja de parecer alguien roto por dentro.
Luego llega el primer punto de
inflexión: ella tiene un plan para robar en el casino en el que trabaja, plan
que sale mal y acaba con Shadowmoon en prisión. Se nota que se quieren cuando
ella se ofrece para confesar y compartir la condena, pero él rehúsa.
Luego seguimos con ella, de
nuevo sola y agobiada con su nueva situación, hasta el punto de acostarse con
el marido de su amiga. No para de decirse que es mientras Shadowmoon no vuelva,
pero no parece tener intención de detenerse en ningún momento… hasta que muere
de la forma que muere.
Aquí aparece uno de los Dioses
que tenemos vistos de capítulos anteriores, Anubis recoge su alma, que no pasa
el pesaje y se dispone a ir a la nada… pero algo tira de ella de nuevo al mundo
terrenal (¿la moneda?).
Ya de vuelta es evidente que
algo ha cambiado: ve a Shadowmoon como una especie de faro de luz, que le atrae
hasta el punto en el que colgaban al protagonista. Aquí vemos que éste zombi en
el que se ha convertido tiene una fuerza descomunal (con una escena un tanto
gore), salvando a su amado y pirándose al terminar.
Y ya viene cierto humor negro,
ella cosiéndose el brazo, la amiga chillando al verla, una escena en el baño
que no calificaré… y charla de chicas como si nada hubiera pasado.
Queda claro que Shadowmoon
pasa a ser su objetivo, aunque antes el mismo Anubis repara su cuerpo (en otro
momento un tanto gore). Y el final? El mismo del capítulo anterior.
Me ha resultado un capítulo
bueno, de presentación de un personaje que creía dejado de lado y que tiene
bastantes mierdas en la cabeza (nunca ha estado satisfecha ni le ha visto
sentido a su vida) en una serie de escenas un tanto escabrosas.
Visualmente sigue pareciéndome
fascinante, el sello de Fuller está por todos lados, con la sangre y las
vísceras que no se molestan en esconder.
Es cierto que es un capítulo
un poco corta rollos, ya que aparca la trama durante todo un capítulo entero
para presentar al personaje, pero en sí mismo funciona estupendamente bien.
Se nota que es una serie de “cable”,
tanto por el formato y lo que se ve en pantalla como por poder permitirse
capítulos como éste.
Valoración Followmytv: 8,4.
Valoración Imdb: 8,1.
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