Siguen sucediéndose los
capítulos basados en momentos puntualmente álgidos de la historia reciente de
la casa real inglesa. En ésta ocasión tenemos uno que gira en torno al romance
de la princesa Margarita con un hombre divorciado.
Llama la atención el
escandalazo que se monta porque la hermana de la reina tenga intención de
casarse con un hombre divorciado, algo que no puede darse sin el consentimiento
real hasta que la joven tenga veinticinco años.
Durante el capítulo veremos la
evolución de la percepción de dicho romance, tanto por parte de la reina como
de la opinión pública, y cómo éste affair distancia a las hermanas.
Desde que Margarita se lo dice
a la reina y ésta asiente al respecto hasta que acaban por enviar al pobre
hombre a Bruselas impidiendo incluso que se vean, pasan muchas fases
intermedias, fases en las que la reina se va dejando influenciar por lo que
opinan sus consejeros (y su madre o su marido).
En el lado de la opinión
pública empieza a verse también lo sujeta a variaciones que está la misma, ya
que algo que se empieza publicando como un gran escándalo acaba por convertirse
en una tragedia al no permitir la reina que estén juntos. Un inicio de
amarillismo evidente.
Éste capítulo está hecho para
que brille la princesa Margarita, una actriz que lo hace estupendamente al
mostrar juventud e ilusión, pero que en opinión no lo hace tan bien cuando las
cosas no son favorables (sigue siendo una buena interpretación, pero no llega a
la excelencia del resto del reparto).
En mi opinión estamos ante un
capítulo un pelín demasiado lento, con unos quince o veinte minutos de
desarrollo centrales que se me han hecho un tanto largos, algo que es la
segunda vez que me pasa en The Crown. Entiendo que haya que tomarse las cosas
con calma en ésta serie y se den su tiempo para construir los escenarios y las
tramas, pero lo que no puede suceder es caer en el aburrimiento.
Como trama secundaria tenemos
al marido, que empieza a ir a un club de caballeros con su amigo, incluso
dejando a su mujer sola un fin de semana.
Por lo demás es un buen
capítulo de una buena serie, con un tema más mundano, pero que tiene
implicaciones como el hecho de que Isabel sea también jefa de la iglesia.
En cuanto a la producción nada
que reprochar, un capítulo espectacular en el que veremos de todo: redacciones
de periódico, aviones, recibiemiento en Irlanda, Sudáfrica, las centralitas de
teléfonos (una genialidad) interiores de palacio, fiestas de alta sociedad,
club de caballeros… un festival para la vista.
Si estáis interesados en la
historia de la casa real no os la podéis perder. Si os gustan los dramas de
época, tampoco. Si os van las series de acción con un buen ritmo, quizá no sea esto
lo que estáis buscando.
Valoración Followmytv: 8,2.
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