Lo dije la semana pasada y lo
repito ésta: puede que veáis un comentario por semana de Sherlock, pero no os
mal acostumbréis porque no es seguro que el ritmo se mantenga constante.
Avisados estáis.
Éste segundo capítulo es el
peor valorado de la temporada, y creo que con justicia, porque me parece el
peor de la serie en su conjunto.
En ésta ocasión tendremos como
eje de la trama un caso que se va complicando más y más, uno que empieza con un
encargo con un ex compañero que se dedica a la banca y que consiste en
averiguar cómo se colaron en las oficinas del banco. El caso, como no podía ser
de otro modo, se complica poco a poco, añadiendo a la mafia china, códigos
secretos y una serie de objetos pasados de contrabando.
Diría que el caso es lo menos
interesante del capítulo, incluso diría que lo lastra y que salvo algún que
otro momento inspirado llega a hacerse hasta pesado. Es algo raro para que yo
lo diga dentro de ésta serie que adoro, pero éste capítulo tiene momentos que
me aburren cosa mala.
Por ejemplo, tenemos la escena
del espectáculo, en la que la cosa se alarga demasiado, restando interés y
deseando que termine de una vez. Incluso diría que a éste capítulo le sienta
mal la duración, quedando más apañado en una horita.
Apenas tenemos nada de la
dinámica entre los dos protagonistas que tanto nos gustó en el primero; aquí la
cosa se enfría y se vuelve mucho más clásica, mucho menos chispeante. Por lo
menos el personaje de Watson parece querer seguir con su vida, buscando trabajo
y saliendo con una chica, pero la influencia de Holmes parece querer impedirle
tener una vida más o menos normal.
Eso sí, el capítulo tiene
algunos momentos dignos de recordar, frases de esas en las que Holmes se queda
con todo el mundo, investigación a la vieja usanza y una música que se te pega
y no te suelta.
No es un mal capítulo,
simplemente se siente como un bache de calidad tras el impresionante capítulo
de apertura, una demostración de que aquí también se puede pinchar. Pero
incluso pinchando queda un capítulo mejor que la gran mayoría de series.
El tramo final tampoco es que
salve el resto de ése pinchazo. La escena de acción es un tanto chapucera, y la
resolución facilona. Al menos tenemos un momento final con Moriarty haciendo de
las suyas.
Lo recordaremos únicamente por
ser el capítulo de presentación de Sarah (la posible novia de John), por ver a
Holmes manipulando a alguien que le quiere de forma muy rastrera (Molly) y por
algún que otro momento puntual (Watson ligando casi de forma inconsciente,
Holmes siendo él mismo…)
En fin, no creo que lo vuelva
a visitar en futuras revisiones de la serie. Totalmente prescindible.
Valoración Followmytv: 8,2.
Valoración Imbd: 8,1.
No hay comentarios:
Publicar un comentario